Dolor de pubis


La pubalgia es la tendinitis de los aductores de la cadera o de los abdominales a nivel de la inserción en el hueso púbico (pubis).
Esta lesión provoca dolor abdominal e inguinal que puede afectar a las actividades deportivas y diarias, hasta determinar la suspensión prolongada de las actividades deportivas.

Pubalgia, tendón, inflamación

La pubalgia es la tendinitis de los aductores de la cadera o de los abdominales a nivel de la inserción en el hueso púbico (pubis). Esta lesión provoca dolor abdominal e inguinal que puede afectar a las actividades deportivas y diarias, hasta determinar la suspensión prolongada de las actividades deportivas. – © Massimo Defilippo

La pubalgia afecta principalmente a los jugadores de hockey, fútbol americano y fútbol casi exclusivamente de sexo masculino. Es casi imposible encontrar otras personas con esta lesión en el hospital.
En raras ocasiones afecta a niños y adolescentes menores de 16 años.

Los músculos y tendones que se ven afectados por la pubalgia se encuentran en el hueso púbico:

  • Abdominal oblicuo externo;
  • Abdominal oblicuo interno;
  • Pectíneo;
  • Aductor corto;
  • Aductor largo;
  • Aductor mayor;
  • Grácil.


Estos músculos pueden sufrir una lesión, mientras que los tendones pueden sufrir una entesitis con calcificación. El dolor puede extenderse en la región abdominal inferior: perineo, testículos, aductores, cadera y muslo.

Los síntomas suelen ser unilaterales, aunque en algunos casos se presentan de forma bilateral.
La aparición es traumática o lenta y los síntomas crecen gradualmente.
El dolor agudo se vuelve crónico debido a que los jugadores no se abstienen de la actividad deportiva.
Esta patología puede prolongarse durante meses o años y puede determinar el fin de la carrera deportiva.
El problema principal es cuando el dolor persiste a pesar del reposo.
Los movimientos que pueden desencadenar la pubalgia son: cambios de dirección, tiros, regate y rotación.
Tos y estornudos suelen aumentar el dolor.
Al fin de diagnosticar la pubalgia y descartar otras enfermedades, se deben realizar otros exámenes.

La pubalgia no es la hernia inguinal, de hecho, no hay protrusión de tejidos.

 

¿Cuáles son las causas de la pubalgia?

La pubalgia solo afecta a los deportistas de alto nivel que practican deportes que estresan el hueso púbico.

El dolor puede tener origen en:

  • Un movimiento violento o agresivo que provoca una lesión en los aductores, abdominales oblicuos o estructura miofascial;
  • Entesitis del tendón de los músculos mencionados;
  • Artropatía degenerativa de la sínfisis púbica;
  • Contractura del músculo psoas ilíaco;
  • Inflamación de la rama pubiana debida a un trauma;
  • Avulsión de los tendones aductores;
  • Inserción anómala de los aductores o del recto del abdomen.

Los factores de riesgo son:

  • Debilidad de los músculos abdominales o inguinales,
  • Practicar deporte con una actitud lordótica (hiperlordosis lumbar) que ejerce presión sobre los músculos abdominales,
  • Desequilibrio entre los aductores (fuertes) y abdominales (débiles) que provoca una distribución anómala de las fuerzas aplicadas sobre el pubis,
  • Programa de entrenamiento muy pesado que puede producir lesiones musculares o entesitis,
  • Las mujeres no sufren de pubalgia ya que sus músculos tienen una mayor capacidad de estiramiento (como por ejemplo durante el embarazo). Por lo tanto, todo depende de la elasticidad.

 

¿Cuáles son los síntomas de la pubalgia?

Por lo general, los atletas que sufren de pubalgia experimentan dolor y rigidez en la zona de la ingle.

¿Dónde se localiza el dolor? El dolor se localiza en el hueso bajo los abdominales y por encima de los órganos genitales. Puede encontrarse un poco más hacia la derecha o izquierda.
El dolor se agrava durante la actividad deportiva, aunque en la fase inicial de la pubalgia el paciente puede seguir jugando.
Cada movimiento que implica una contracción abdominal y de los músculos aductores empeora los síntomas.
Cada vez que la presión abdominal aumenta, también aumenta la presión sobre el hueso púbico, lo que provoca dolor.
Algunas de las actividades de la vida diaria pueden resultar dolorosas, como, por ejemplo, toser, defecar o la actividad sexual. En la etapa avanzada, se puede experimentar dolor tan solo saliendo del coche o permaneciendo de pie. Además, el dolor puede ser constante durante todo el día, lo que dificulta la realización de las actividades diarias.
El paciente no logra identificar el origen del dolor, ya que tiene la sensación de un dolor generalizado.

La intensidad del fastidio puede variar con el tiempo: puede mejorar con el reposo y empeorar después de un partido.
Sin tratamiento, este trastorno se vuelve crónico y puede determinar el fin de la carrera deportiva.

 

¿Cómo se diagnostica la pubalgia?

El médico especialista a quien acudir es el fisiatra u ortopedista.
Durante el examen médico, el médico examina el historial clínico del paciente para averiguar la presencia de factores de riesgo, tales como la actividad deportiva o trabajos que requieren movimientos repetitivos. Se debe absolutamente comunicar al médico si el fastidio tiene origen de un trauma directo o se ha desarrollado de forma gradual. El médico debe ser informado sobre los síntomas del paciente y su duración, así como el tipo de dolor.

Examen físico
Ante todo, el médico examina la zona dolorida y comprime el tendón afectado para determinar el origen de los síntomas y la eventual hinchazón del tendón.
Existe una prueba para evaluar la pubalgia: se coloca el paciente en la cama en posición supina con las rodillas dobladas y la espalda bien adherente a la cama. A continuación, se le pide al paciente cerrar las caderas y acercar las rodillas, contra la resistencia del médico. La prueba es positiva si el paciente siente dolor en la zona inguinal.

El médico debe examinar si hay una restricción de movimiento, ya que los síntomas pueden originarse de un trastorno articular.
Al fin de descartar el atrapamiento de un nervio, se deben evaluar con cuidado los reflejos tendinosos. En caso de pubalgia, la cosa más importante es evaluar la debilidad de los músculos abdominales, especialmente el recto abdominal. Por lo general, hay una gran diferencia de fuerza entre los músculos abdominales y aductores.

Diagnóstico diferencial
El médico debe descartar:

Examen diagnóstico
Para diagnosticar la pubalgia, los exámenes instrumentales pueden ser muy útiles.
El médico puede recetar una radiografía para descartar otras patologías tales como la artritis o fracturas, aunque la radiografía no muestra los tendones o músculos.
La ecografía musculo-esquelética en cambio, es de utilidad para identificar los daños en los tendones, ya que es un procedimiento de diagnóstico que ofrece imágenes de tejidos blandos.
La resonancia magnética es la prueba más adecuada en este caso, ya que muestra la hinchazón del tendón, inflamación, lesiones y otros problemas tales como la artritis, calcificaciones, tumores, etc.

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Este artículo contiene información general que no se sustituye al examen médico, no se puede utilizar para diagnosticar o establecer un tratamiento. Hable con su médico antes de seguir las instrucciones contenidas en el sitio.

Me llamo Massimo Defilippo, soy un Fisioterapeuta de Rubiera (pueblo entre Reggio Emilia y Módena en Emilia-Romaña) y llevo practicando terapia física y osteopatía desde 2008. Me he graduado en la universidad “Magna Grecia” de Catanzaro (Calabria) aprobando con 110/110. Biografía completa Dr. Massimo Defilippo

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