Rodilla hinchada e inflamada | remedios


La rodilla hinchada (también conocida como “líquido en la rodilla”) es un problema frecuente producido por la acumulación de líquido en el interior o alrededor de la articulación.
La hinchazón de la rodilla puede aparecer de repente o de forma gradual y puede limitar el movimiento de la pierna, provocando molestias al caminar.

El derrame de líquido articular en la rodilla se desarrolla, sobre todo:

  • Tras sufrir un traumatismo o esguince
  • Debido a la artritis (inflamación de la articulación)
  • Sin un motivo concreto

 

Causas de la rodilla hinchada

La rodilla dispone de una cápsula articular, similar a una bolsa, alrededor de la articulación.
La cápsula contiene el líquido sinovial que nutre y lubrica la articulación para que pueda moverse sin problemas.
La cápsula articular funciona como una bolsa que mantiene el líquido en el interior de la articulación.
La hinchazón de la rodilla se produce cuando se acumula un exceso de líquido en el interior de la cápsula, lo que puede ocurrir por:

  • Sangrado en la articulación (hemartro): suele deberse a una lesión y la hinchazón en la rodilla aparece de manera muy rápida. Ésta puede ser muy aguda y producir rigidez en toda la pierna.
  • Acumulación de líquido sinovial (líquido en la rodilla): en este caso, la hinchazón tiende a manifestarse de forma gradual. En algunos casos, puede aparecer y desaparecer. Por otra parte, la cantidad de líquido en la rodilla es variable. Suele originarse por artrosis o artritis.
  • Intervención quirúrgica: la rodilla hinchada también puede ser el efecto de una operación, por ejemplo la sustitución de la articulación con una prótesis. En este caso, la hinchazón desaparece al cabo de algunos meses de la operación, si bien el dolor desaparece antes.
    Los pacientes suelen preguntar cuánto tarda en reducirse la hinchazón articular, porque desean recuperarse lo antes posible.
    En realidad, recuperación e hinchazón no siempre están relacionadas.
    El paciente puede volver a trabajar, ya que la rodilla puede hincharse y no doler después de una operación quirúrgica.

 

Rodilla hinchada de repente

La hinchazón repentina de rodilla tras sufrir una lesión se debe a un hemartro, es decir a la acumulación de sangre dentro de la articulación.
En este caso, una de las estructuras que se encuentran dentro de la rodilla queda dañada y empieza a sangrar, aumentando la presión en la articulación. La hinchazón se desarrolla y la rodilla adquiere el aspecto de una pelota:

  • Roja
  • Caliente


El derrame de líquido articular se percibe en la parte superior, inferior y alrededor de la rodilla.
La articulación se muestra:

Las tres causas más importantes de hemartro son:

  1. Rotura de ligamentos: uno de los ligamentos se rompe por completo. Se trata de una causa frecuente y suele afectar al ligamento cruzado anterior de la rodilla (LCA). En caso de lesión de los ligamentos cruzados, la rodilla no consigue doblarse más de 90-100° ni estirarse durante varias semanas.
  2. Lesión de menisco: el hematoma se produce si la lesión ocurre en la parte más externa.
  3. Fractura de rodilla: rotura de uno de los huesos que forman la articulación de la rodilla. Una hinchazón de este tipo puede requerir un tratamiento médico urgente para impedir que se produzcan complicaciones.
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Hinchazón de rodilla después de un accidente

Si la rodilla se hincha cuando ya han pasado varias horas o días de la lesión, puede que se deba a un aumento del líquido sinovial en la articulación (o sinovitis).
Esto se produce cuando hay algún daño en el interior de la rodilla.
La gravedad de la hinchazón depende de cada caso.

Al poner una mano sobre ambas rodillas, se nota que la rodilla está hinchada y caliente, un efecto normal de la inflamación.
Después de un traumatismo, es posible notar una especie de bolsa en la rodilla. Se trata de una bursitis de rodilla.

Las causas más frecuentes de la hinchazón de rodilla son:

  1. Lesión de menisco: lesión en la parte interna del cartílago que rodea la articulación (la parte interna del menisco no está vascularizada, por lo tanto, al lesionarse no hay sangrado).
  2. Hiperextensión de rodilla: estiramiento o rotura de ligamentos.
    La acumulación de líquido en la rodilla puede variar de un día para otro y suele mejorar a medida que el paciente mejora.
    Por lo general, los tejidos blandos (músculos y cápsula articular) tardan entre 6 y 12 semanas en recuperarse de las lesiones.
    Las lesiones del cartílago pueden requerir una intervención quirúrgica, debido a la falta de flujo sanguíneo.

 

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Hinchazón gradual de rodilla sin lesión

Entre las causas de hinchazón gradual de rodilla sin haber sufrido una lesión se encuentran enfermedades crónicas como:

  • Artritis
  • Artrosis (sobre todo en personas mayores)

La hinchazón puede cambiar en función del día y de las actividades realizadas.
Por lo general, la hinchazón no es muy evidente.
La artrosis (es decir, la degeneración de las articulaciones) es la enfermedad que más suele provocar una hinchazón de este tipo.
La artrosis lleva al cuerpo a producir una cantidad mayor de líquido en la rodilla.
Durante los días en los que la pierna está sobrecargada, la rodilla puede inflamarse y producir más líquido para intentar protegerse y recuperarse.

La hinchazón lateral puede ser consecuencia de una reducción del cartílago en dichas zonas de la rodilla y suele manifestarse en la primera fase de la artrosis.
La hinchazón en la parte externa suele ser menos frecuente que la del lado interno, porque esta parte de la rodilla tiene más posibilidades de sufrir artrosis.
La hinchazón en la parte externa tiene lugar sobre todo en caso de rodilla valga, ya que se produce una sobrecarga mayor en la parte lateral de la rodilla.

La tendinitis ocasiona una inflamación del tendón, sobre todo del cuádriceps en la parte alta (en la parte superior de la rótula) y en la parte inferior del tendón rotuliano. No obstante, la hinchazón no se observa desde el exterior.

 

Hinchazón rápida de rodilla sin lesión

En algunos casos, la hinchazón se produce de manera rápida sin ningún traumatismo. Las causas más frecuentes de este trastorno son:

  1. Infección: las infecciones hacen que aumente la cantidad de líquido sinovial producido. Las infecciones suelen aparecer después de una operación quirúrgica o de una herida profunda y pueden llegar hasta las articulaciones. Combatir una infección articular puede ser complicado y, en algunos casos, se requiere una operación quirúrgica para que el problema desaparezca.
  2. Gota: los niveles elevados ácido úrico provocan la formación de cristales, que se depositan en las articulaciones. Este depósito provoca la inflamación de la rodilla y una leve hinchazón. El tratamiento para la gota incluye medicamentos y una dieta adecuada.

 

Rodilla hinchada en la parte lateral

La hinchazón también puede afectar a la parte externa de la cápsula articular.
Suele originarse por:

  • Inflamación de una de las bolsas de la rodilla (bursitis)
  • Traumatismo de los músculos que rodean la rodilla (hematomas)

Las hinchazones más frecuentes en la parte externa de la articulación son:

  1. Bursitis: las bolsas son pequeños sacos llenos de líquido situadas entre el hueso y los tejidos blandos, que permiten reducir la fricción entre las estructuras. Si la fricción aumenta por una enfermedad determinada, estas bolsas pueden inflamarse.
    En este caso, la hinchazón no se extiende a toda la rodilla, sino que se localiza en el punto donde se encuentra la bolsa. La hinchazón delante de la rótula puede deberse a la bursitis prerrotuliana.
    Una hinchazón en la zona posterior de la rodilla, del tamaño de una naranja, es consecuencia de la bursitis poplítea, también conocida como quiste de Baker.
  2. Hematoma: un traumatismo en los tejidos blandos de la rodilla puede provocar sangrado.
    La sangre que se encuentra alrededor de los músculos puede acumularse en un coágulo duro.
    Si solo se trata de un sangrado leve, suele aparecer un pequeño moratón llamado contusión.

 

Rodilla hinchada después de una cirugía

Es habitual que la rodilla se hinche después de una intervención quirúrgica y, con frecuencia, el paciente también presenta fiebre.

Una operación rutinaria, como la de menisco (meniscectomía), produce una hinchazón que dura varias semanas.

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La hinchazón tras a la intervención no debe crear ansiedad, pues tarda mucho en desaparecer.
Después de una operación de reconstrucción de LCA (ligamento cruzado anterior), la hinchazón en la rodilla tarda por lo menos 4-6 semanas en desaparecer.

El tamaño de la articulación suele ser mayor después de una operación de fractura, una consecuencia normal. No se trata de un derrame articular, porque la parte hinchada de la rodilla está dura.

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Otras causas de hinchazón de rodilla

Generalmente, l líquido que se forma permanece dentro de la rodilla, porque la cápsula actúa como una barrera que impide que el líquido salga. No obstante, a veces pueden producirse hinchazones fuera de las articulaciones.

Las infecciones pueden producir hinchazón de rodilla, en especial:

En este caso, el médico receta antibióticos para reducir los síntomas.

 

Causas raras de la rodilla hinchada o inflamada

  1. Dislocación de la rótula: al flexionar o extender la pierna, la rótula se desplaza y termina en la parte anterior de la rodilla. Una fuerza externa puede empujarla hacia un lado y hacer que se salga de su lugar anatómico. Este traumatismo provoca hinchazón de rodilla.
  2. Rodilla del corredor: la inflamación del tendón rotuliano puede provocar una hinchazón leve en la parte anterior de la rodilla.
  3. Tumor óseo: existen varios tipos de tumor que pueden provocar hinchazón de rodilla, incluso en los niños.
  4. TVP: la trombosis venosa profunda es un coágulo de sangre que se forma en una vena profunda, por lo general en las piernas.
    Normalmente, estos coágulos son dolorosos y se forman tras haber descansado durante mucho tiempo en la cama, después de una intervención quirúrgica o de un viaje en avión.
  5. Hemartro por problemas de circulación: se trata de un sangrado repentino que se produce en la articulación de las personas que:
    1. Tienen problemas de coagulación sanguínea
    2. Toman medicamentos para fluidificar la sangre, como por ejemplo Warfarina

 

Rodillas hinchadas durante el embarazo 

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Durante el embarazo, a las mujeres se les suelen hinchar las rodillas, sobre todo en el segundo trimestre.
Este problema se deriva del aumento de peso del niño, lo que incrementa la presión que el útero ejerce sobre la vena cava (vena muy grande que lleva la sangre desde las piernas hasta el corazón).
Este trastorno puede llevar a la retención de líquidos en las rodillas, aunque también puede afectar a:

  • Pies
  • Manos

Para reducir la hinchazón en las piernas, se debe evitar permanecer mucho tiempo de pie e intentar descansar lo máximo posible con las piernas levantadas.
Permanecer mucho tiempo de pie aumenta la presión sobre la vena cava, lo que disminuye la calidad del flujo sanguíneo.

El calor tiende a empeorar la hinchazón en las piernas, mientras que las gasas frías pueden reducir la hinchazón en las rodillas.

Se debe tener mucho cuidado con las piernas hinchadas durante el embarazo, ya que pueden deberse a una enfermedad más grave como preeclampsia o gestosis.
Hay que consultar al médico para excluir una enfermedad más grave si la hinchazón:

  • No desaparece tras descansar
  • Si afecta a muchas partes del cuerpo

Se le debe indicar al médico si la hinchazón de la rodilla se manifiesta junto con:

 

Rodilla hinchada o inflamada en niños

Los niños suelen padecer hinchazón de rodilla por culpa de golpes o lesiones. Sin embargo, en algunos casos la hinchazón puede deberse a otras causas.
La hinchazón de rodilla en niños debida a un esguince es menos evidente con respecto a los adultos.

La enfermedad de Lyme puede provocar inflamación e hinchazón continua en las articulaciones. Es bastante frecuente en la región nororiental de Estados Unidos, por lo que es importante excluir esta enfermedad en ésta y otras zonas de riesgo.
Los niños también pueden presentar líquido en la rodilla por:

La artritis séptica es una infección que provoca dolor, calor e hinchazón. La bacteria que provoca esta infección suele afectar a las rodillas, aunque también puede afectar a otras articulaciones.

 

Tratamiento para la Rodilla hinchada

Los tratamientos para la hinchazón de rodilla son muchos y la elección depende del factor desencadenante:

  1. Hielo: puede emplearse para disminuir la velocidad del flujo sanguíneo y, por tanto, para reducir la hinchazón y el dolor. Es importante que el hielo se utilice de manera correcta, cada 10 minutos.
  2. Compresión: para reducir la hinchazón, se deben utilizar vendajes elásticos y rodilleras para crear la compresión adecuada sobre la rodilla.
  3. Fármacos: se pueden recetar fármacos antiinflamatorios no esteroideos (AINEs) como el neobrufen o el Voltaren para reducir la hinchazón de rodilla.
  4. Aspiración: el médico, a través de una aguja, puede extraer el líquido de la rodilla. En algunos casos, el líquido puede volver a aparecer.
  5. Infiltraciones de cortisona: la cortisona es una hormona esteroidea que, mediante la supresión del sistema inmunitario, reduce:
    • Inflamación
    • Dolor

 

Remedios naturales para la rodilla hinchada

Si la hinchazón y el dolor duran más de 48 horas o van acompañados de fiebre y dolor agudo, se debe acudir al médico para realizar un diagnóstico correcto.
Se debe evitar cargar peso sobre la rodilla afectada hasta que no desaparezca la hinchazón.
Un vendaje elástico no ayuda a reducir la hinchazón de rodilla, es mejor aplicar una gasa con arcilla verde durante toda la noche.

Hielo. Poner hielo triturado en un trapo y mantenerlo sobre la rodilla durante 20 minutos. El hielo mejora la hinchazón y el dolor de rodilla.
Repetir cada 2-4 horas y mantener la pierna levantada.
El hielo solo es útil:

  • En las primeras 24 horas después de una lesión
  • Tras la aparición/empeoramiento del dolor

Levantar la pierna. Apoyar el pie sobre algunos cojines.
Un truco para mantener la pierna elevada durante toda la noche consiste en colocar unos soportes bajo las patas de la cama para que los tobillos permanezcan en una posición más elevada que el corazón.

Rehabilitación. Si el individuo padece artrosis en la rodilla, es importante realizar ejercicios de:

  • Estiramiento
  • Tonificación muscular

Estos ejercicios ayudan a calentar y estirar los músculos y son muy útiles después de largos períodos de descanso.
La actividad física regular es muy eficaz para mejorar:

  • Condición física
  • Tono muscular

Sin embargo, las personas que no estén acostumbradas a estos los ejercicios no deben exagerar.
Se debe optar por actividades suaves que no ocasionen dolor, como:

  • Yoga
  • Natación

Obesidad. En caso de sobrepeso, se debe cambiar de dieta para perder el exceso de kilos. Para conseguirlo, se debe acudir a un profesional experto y cualificado.
El exceso de peso ejerce una presión mayor sobre las articulaciones y los músculos, sobre todo en las rodillas y los tobillos.
Una presión excesiva favorece la inflamación de la articulación y es, por tanto, un factor desencadenante de la hinchazón de rodilla.

Masoterapia.
La masoterapia es un tratamiento muy eficaz que puede asociarse a los descritos para que la hinchazón de rodilla desaparezca.
El tratamiento manual favorece:

  • Producción de endorfinas y de otras sustancias químicas analgésicas
  • Circulación eficaz

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Este artículo contiene información general que no se sustituye al examen médico, no se puede utilizar para diagnosticar o establecer un tratamiento. Hable con su médico antes de seguir las instrucciones contenidas en el sitio.

Me llamo Massimo Defilippo, soy un Fisioterapeuta de Rubiera (pueblo entre Reggio Emilia y Módena en Emilia-Romaña) y llevo practicando terapia física y osteopatía desde 2008. Me he graduado en la universidad “Magna Grecia” de Catanzaro (Calabria) aprobando con 110/110. Biografía completa Dr. Massimo Defilippo