Diabetes durante el embarazo

¿Qué es la diabetes durante el embarazo o gestacional?

La definición de la diabetes gestacional es una intolerancia a la glucosa que se produce durante el embarazo y es, por lo tanto, una enfermedad relacionada con el aumento de la concentración de glucosa en la sangre.
Esta forma de diabetes es causada por una hormona producida por la placenta llamada lactógeno placentario que interfiere con la acción de la insulina.

nutricionista, dieta, diabetes, embarazo

Nutricionista Dr. Valentina Bertarini – © Massimo Defilippo

La forma gestacional se puede definir como “fisiológica”, ya que la acción de la hormona lactógeno placentario se ve obstaculizada por el páncreas, que para solucionar el problema produce mayores cantidades de insulina.

Muy a menudo este aumento de la insulina por el páncreas no es suficiente para contrarrestar la acción de la hormona lactógeno placentario, la consecuencia es una baja tolerancia a la glucosa con un consiguiente aumento de azúcar en la sangre. La diabetes gestacional aparece alrededor del segundo trimestre y generalmente termina en el momento del parto cuando la concentración de hormona lactógeno placentario se reduce muy rápidamente y los valores de la glucemia vuelven a la normalidad.

 

Metabolismo del azúcar, hipoglucemia e hiperglucemia

El azúcar constituye el combustible de las células.
Una vez llegado al intestino, este es absorbido por la mucosa y pasa a la sangre que debe distribuirlo a las células de todos los órganos y los tejidos para el sustento.
El transporte del azúcar a las diferentes células es regulado por una hormona producida por el páncreas: la insulina.

Si el nivel de la insulina en la sangre es en el nivel adecuado, las células absorben la cantidad correcta de azúcar y en la sangre se encuentra la concentración adecuada de glucemia (glucosa).
Una mayor cantidad de insulina produce un aumento en la transferencia de azucares a las células y una disminución de la glucosa en la sangre (hipoglucemia).

Por el contrario una disminución de la insulina provoca un aumento en la concentración de azúcar en la sangre (hiperglicemia) con la consiguiente reducción de la nutrición de las células. La diabetes es una enfermedad que altera este mecanismo.

 

Hay dos tipos de diabetes

La diabetes tipo 1 se caracteriza por una falta total de insulina.
Es una enfermedad autoinmune en la que el sistema inmunitario reconoce las células del páncreas como enemigas y las destruye completamente.
La diabetes tipo II se caracteriza por una baja tasa de insulina y la capacidad de llevar a cabo su función natural.
La diabetes gestacional es de tipo II.
Este trastorno se produce durante el embarazo y retrocede con el nacimiento del bebé.
En algunos casos, sin embargo, persiste y se estabiliza con el paso del tiempo.

 

Propagación de la enfermedad

La diabetes gestacional es una patología muy común, las estadísticas estiman que una de cada siete mujeres está en riesgo de desarrollar esta patología y que esta enfermedad tiene una frecuencia que va del 2 al 4 por ciento.
La enfermedad es poco común en las mujeres embarazadas menores de 25 años, si bien es muy común sobre la edad de 35.

 

¿Cuáles son los factores de riesgo que aumentan la probabilidad de desarrollar la diabetes gestacional?

Existen varios factores de riesgo, incluyendo:

  • Edad de la madre: la diabetes gestacional generalmente se desarrolla en mujeres mayores de 35 años de edad,
  • Peso de la madre: una mujer con sobrepeso u obesidad tiene un mayor riesgo de desarrollar diabetes gestacional.
  • Dieta y alimentación: una dieta grasa causa un aumento del colesterol y los triglicéridos en la sangre que se vuelve “aceitoso” e impide la acción de la insulina.
  • Familiaridad: una mujer que tiene una alteración de la tolerancia a la glucosa, hiperglucemia en ayunas, familiares de primer grados con diabetes, embarazos anteriores durante los cuales se ha desarrollado la diabetes gestacional, tienen un riesgo mayor.
  • Macrosomía fetal: una mujer en su segundo embarazo, que ha dado a luz al primer niño que pesaba más de 4 kg tiene un elevado riesgo de desarrollar diabetes gestacional durante su segundo embarazo.
  • Otros factores de riesgo: entre otros factores de riesgo cabe mencionar el tabaquismo, el embarazo doble debido a la mayor producción de hormona lactógeno placentario y el síndrome del ovario poliquístico que causa resistencia a la insulina ya antes del embarazo.

Riesgos para el bebé: desde malformaciones a la obesidad

La diabetes gestacional puede provocar aborto o muerte del feto en el último trimestre del embarazo (muerte fetal tardía) y causar problemas en el bebé que pueden ser fatales:

  • Malformaciones fetales: están relacionadas con el aumento de cetonas (una característica de la diabetes) y la hiperglucemia, que puede causar retrasos en el crecimiento de diversos órganos, tales como retraso en el desarrollo del sistema nervioso, la consecuencia es el retraso mental.
  • Desarrollo fetal: la principal consecuencia de la diabetes gestacional es un excesivo desarrollo del feto por la presencia de altas concentraciones de glucosa en la sangre, entonces el niño tendrá una circunferencia abdominal mayor de lo normal. El desarrollo excesivo del feto puede causar un riesgo de fractura y luxación de hombro en el momento del parto. En estos casos es aconsejable practicar una cesárea. A veces, para evitar la macrosomía se recurre a la inducción del parto que pero no disminuye otras complicaciones.
  • Hipoglucemia: la diabetes gestacional puede causar hipoglucemia en el recién nacido. El bebé, de hecho, después de haber vivido en condiciones de hiperglucemia, al nacer tiene una concentración reducida de azúcar en la sangre y en las 48 horas después de dar a luz puede desarrollar una hipoglucemia grave. La situación puede normalizarse durante la lactancia pero, a menudo es necesario hacer transfusiones de sangre y glucosa para normalizar la glucemia del recién nacido.
  • Hiperbilirrubinemia que causa la ictericia neonatal, se caracteriza por la piel amarillenta, estrés respiratorio, dificultad respiratorias del bebé, y deficiencias de minerales como el calcio.
  • Parto prematuro, debido principalmente al aumento del líquido amniótico causado por la hiperglicemia. En un embarazo con diabetes aumenta el riesgo de parto prematuro en un 30%, además el bebé puede ser más débil.
  • Predisposición a la obesidad: según estudios recientes los niños nacidos de madres con diabetes gestacional tienen un mayor riesgo de desarrollar obesidad infantil. Aunque todavía no está bien claro el mecanismo, parece que el aumento del nivel de azúcar en sangre de la madre influye mucho en el futuro del niño y aumenta el riesgo de tener sobrepeso u obesidad en el grupo de edad entre 5 y 7 años.

Complicaciones para la madre

La diabetes gestacional puede tener complicaciones muy serias incluso para la madre.
Aunque el pronóstico es favorable y la diabetes desaparece, en algunos casos este se vuelve a presentar después de unos pocos años como la diabetes tipo II. Por otra parte, también hay otras complicaciones a corto plazo:

Complicaciones de tipo ginecológico: puede ser necesaria una cesárea para evitar que el paso del bebé macrosomico por el canal del parto provoque laceraciones vaginales.

Complicaciones de tipo endocrinológico: las mujeres con diabetes gestacional tienen un riesgo de desarrollar hipotiroidismo subclínico (es decir, no se manifiesta con síntomas específicos) y el desarrollo de autoanticuerpos dirigidos contra la tiroides. El mecanismo no está claro.

 

Diagnóstico de la diabetes gestacional y pruebas

Para hacer el diagnóstico de la diabetes gestacional tenemos que confiar principalmente en análisis de laboratorio que se llevan a cabo normalmente durante el segundo trimestre del embarazo, en torno a la vigesimocuarta semana. El diagnóstico debe realizarse a través de pruebas específicas:

  • Detección básica: es el primer examen y se llama curva de glucosa del embarazo o test O’Sullivan. Es una prueba que se realiza en las mujeres embarazadas que se encuentran entre la 26 ª – 28 ª semana de gestación (y alrededor de las 16-18 semanas para las mujeres en riesgo). La mujer debe tomar una solución de glucosa (50gr) y se toman dos muestras de sangre a dos horas, antes de tomar la solución y después de haberla tomado. Antes de ingerir la solución los valores de referencia no deben superar los 110mg/dl y después de tomar la solución de glucosa los valores de glucosa son normales hasta un máximo de 140 mg/dl. Si la prueba muestra valores superiores a 140 mg/dl el resultado se dará como positivo y se pasa a la prueba siguiente. Si el valor obtenido es mayor a 198 mg/dl la mujer tiene diabetes gestacional.
  • Curva de glucosa (test de tolerancia oral de la glucosa). Esta prueba es similar a la anterior con la diferencia de que esta vez la solución para beber contiene una doble cantidad de glucosa, alrededor de 100 g, y las muestras que deben tomarse son cuatro: antes de tomar la solución y a la hora, dos horas, y tres horas después de tomar la glucosa. El diagnóstico de diabetes en este caso se realiza cuando los valores de la glucemia son superiores a 95 mg/dl antes de tomar la glucosa, superiores a 180 mg/dl después de una hora de la ingesta de la solución, superiores a 155 mg/dl después dos horas de la ingesta de la glucosa, y superiores a 140 mg/dl después de tres horas de la ingesta de la glucosa.
  • Se comprueban dos valores en la sangre: la hemoglobina glucolisada y la fructosamina para determinar cuándo ha aparecido la diabetes.
  • El análisis de orina puede mostrar glucosuria, es decir, la presencia de azúcar en la orina (debería estar ausente).

Una vez hecho el diagnóstico de diabetes gestacional es recomendable llevar a cabo pruebas para el control del crecimiento y el estado de salud del feto tales como:

  • Monitoreo del bienestar fetal: útil para evaluar si el feto está afectado por la macrosomía, es decir ,si tiene un tamaño superior a lo normal.
  • Detección de anomalías congénitas: permite determinar la presencia de malformaciones fetales durante el desarrollo de los órganos. Es una simple ecografía que se realiza desde la 16ª semana.
  • Prueba de estrés: es una prueba usada para medir la frecuencia cardíaca fetal y los movimientos fetales para ver si son normales. Asimismo, también está prevista la evaluación de la cantidad de líquido amniótico. Es una prueba que se realiza a través de una herramienta que gracias al ultrasonido permite determinar el latido del corazón del feto. Generalmente, se lleva a cabo al final del embarazo en la fecha próxima al parto, pero en situaciones de embarazos de riesgo, también se realiza en los meses antes del nacimiento.

 

Los síntomas de la diabete gestacional

La diabetes gestacional es una enfermedad que en la mayoría de los casos es asintomática y se descubre durante los exámenes de rutina que se suelen llevar a cabo durante el embarazo. A veces, se puede manifestar síntomas poco específicos, como náuseas, dolor de cabeza y vómitos, (típicos del embarazo) o síntomas típicos de la diabetes, tales como poliuria (orinar con frecuencia), glucosuria (glucosa en orina), un aumento excesivo del líquido amniótico que se produce durante una ecografía, polidipsia, (sed continúa), fatiga y aumento de peso rápido.

Prevención y cura: cómo prevenir la diabetes gestacional con una dieta con una dieta y una alimentación adecuada

La prevención de la diabetes gestacional incluye una dieta saludable sin alimentos demasiado azucarados y con alimentos altos en fibra y verduras, además de un estilo de vida adecuado con una actividad física moderada.
Es útil un curso de gimnasia durante el embarazo. La dieta para la diabetes gestacional debe ser prescrita por un especialista y debe ser normocalórica para no afectar al crecimiento del bebé, reduciendo la ingesta de azúcares primarios y secundarios.
El nivel de glucosa en la sangre debe ser controlado continuamente (con un índice glucémico) para determinar la efectividad del tratamiento.

La alimentación en la diabetes gestacional.
Muy importante en la prevención y aún más en el tratamiento de la diabetes gestacional es la fuerza de la mujer. De hecho, es el primer tratamiento prescrito por el médico cuando se detecta este tipo de diabetes. Vamos a ver qué alimentos deben evitarse y cómo crear una dieta equilibrada para este tipo de patología, teniendo en cuenta que una dieta de este tipo nunca debe ser inferior a 1800-200 kcal para favorecer el suministro adecuado de nutrientes a la madre y el bebé. No se recomiendan entonces todas las formas de ayunas, como por ejemplo el ayuno terapéutico que puede ser útil en el caso de la diabetes tipo II.

Alimentos a evitar y alimentos permitidos
Para tener bajo control el azúcar en la sangre a través de la dieta es necesario limitar el consumo de carbohidratos y alimentos que contengan azúcar.
Podemos estructurar la ingesta de alimentos de la siguiente manera:

Se deben evitar los alimentos procesados y los productos lácteos tales como pasteles y helados. También hay que limitar el consumo de alimentos ricos en grasas y proteínas animales: queso, carne, crustáceos, huevos, etc.
Los carbohidratos se deben limitar, pero no se eliminan, ya que deben ser alrededor del 45% de las calorías diarias.
Entre los alimentos permitidos se encuentran pan y pasta integral, legumbres y arroz.
Se permiten, aún mejor, se recomienda aumentar las frutas y verduras y todos los alimentos ricos en fibras.
Las verduras se pueden comer, mejor si son crudas.
Para la ingesta de proteínas se recomienda consumir pescado y verduras frente a las carnes rojas para evitar el aumento del colesterol. Esto es fundamental para reducir las grasas en la dieta, ya que la obesidad favorece la aparición de la diabetes.
También es necesario limitar la ingesta de grasas, evitando tomar demasiados quesos.
Para el aderezo es mejor el aceite virgen extra.

Ejemplo de dieta
La dieta recomendada durante el embarazo también en caso de diabetes gestacional debe tener alrededor de 1800-200 kcal, y puede ser dividida en cinco comidas, tres principales y dos meriendas.

Desayuno– elegir entre:

  • Un café edulcorado con aspartamo, una rebanada de pan de trigo entero de aproximadamente 50g y una manzana;
  • Un café edulcorado con aspartamo, 2-3 rebanadas de pan integral y un melocotón;
  • Un café o un té edulcorado con aspartamo, 2-3 tostadas integrales o 3 rebanadas de melón.

Merienda de media mañana y tarde
Alternar entre la mañana y la tarde las siguientes propuestas:

  • Un poco de fruta dulce (por ejemplo, manzana o naranja) y 2-3 rebanadas de pan integral.

Almuerzo– elegir entre las siguientes opciones:

  • Una porción de pasta o arroz (50g) todo sazonado con un verduras a elección.
  • Una porción de 250 g de legumbres (garbanzos, alubias o guisantes), 50 g de pan de grano entero y una fruta o una porción de verduras.
  • Una porción de 250 g de pescado (está bien cualquier tipo de pescado), 50 g de pan integral y una fruta o una porción de verdura.

Cena– una de las siguientes alternativas:

  • Sopa de verduras o caldo con 20 g de pasta o arroz, dos piezas de fruta y una porción de vegetales.
  • Una porción de pescado de 250g, o una lata de atún 80g, 50g de pan integral, una fruta o una porción de verduras.
  • Una porción de nueces y pistachos (50 g), 50 g de pan integral, una fruta o una porción de verduras.

 

Tratamiento farmacológico para la diabetes gestacional

El médico puede prescribir medicamentos hipoglucemiantes orales que se administran normalmente en el caso de la diabetes tipo II y no son adecuados para la diabetes gestacional, ya que pueden causar daño al feto.
Existen tres tipo de insulina que se utilizan para la cura de esta diabetes:

  • Insulina de zinc, que se administra tres veces al día con la acción diaria media-larga,
  • Insulina normal que se administra de una a tres veces al día, media hora o una hora antes de comer,
  • Insulina isófana, un tipo de insulina cuya actividad es media y la dosis depende de la gravedad.

 

Remedios naturales y medicina alternativa

Hay algunos remedios homeopáticos que se pueden tomar después de haber cambiado la alimentación.
Los productos a base de hierbas que deben tenerse en cuenta son las infusiones, por ejemplo a base de hojas de nogal que contienen sustancias ligeramente hipoglucemiantes y suplementos a base de fibra tales como semillas de psyllium que reducen la ingesta de azucares.

Parece que tienen una acción hipoglucemiante también algunas plantas como el eucalipto y el mirto.
El eucalipto contiene sustancias que reducen la absorción de los azucares, en cambio el mirto inhibe las enzimas que se utilizan para la absorción de azucares, mientras que la galega officinalis potencia la acción de la insulina.

 

Preguntas frecuentes:

¿La diabetes gestacional se puede prevenir recurriendo a la detección precoz?
Las personas con riesgo deben llevar a cabo las pruebas de rutina para la prevención de la diabetes antes que las otras.

¿La diabetes gestacional se puede controlar con la alimentación?
Sí, la diabetes gestacional se puede curar con la alimentación. Si la alimentación por sí sola no es suficiente hay que ponerse en contacto con el ginecólogo o el endocrinólogo para establecer el tratamiento más adecuado.

Artículos Relacionados:

Este artículo contiene información general que no se sustituye al examen médico, no se puede utilizar para diagnosticar o establecer un tratamiento. Hable con su médico antes de seguir las instrucciones contenidas en el sitio.

Me llamo Massimo Defilippo, soy un Fisioterapeuta de Rubiera (pueblo entre Reggio Emilia y Módena en Emilia-Romaña) y llevo practicando terapia física y osteopatía desde 2008. Me he graduado en la universidad “Magna Grecia” de Catanzaro (Calabria) aprobando con 110/110. Biografía completa Dr. Massimo Defilippo